Hemos tenido que esperar 8 años para volver a ver a Mel Gibson frente a las camaras, pero ha merecido la pena.
Se ha embarcado en un proyecto a su medida, un personaje de su estilo que le permite lucirse y demostrar que aunque más mayor, sigue estando estupendo.
Martin Campbell dirige una historia que conoce muy bien, él mismo fue el director de la miniserie británica que ha dado origen a la cinta; y demuestra que se le dan muy bien las películas de acción. Tiene mucho ritmo, la violencia necesaria y un puntito tierno que le viene al pelo.
Mel Gibson encarna a un policia, algo chulo, duro y solitario que ve morir a su hija a la puerta de su casa. A partir de ahí empieza una venganza que va destapando un caso de corrupción politica y empresarial. Su personaje nos recuerda al de Rescate, o El patriota, por lo que Gibson está muy cómodo, y eso se nota. Van mezclando las escenas de investigación con la tristeza de un padre que recuerda los mejores momentos junto a su hija, lo que le da a la cinta un puntito sentimental que hace de contrapunto perfecto a la acción. Creo que es uno de los aciertos del director, dejar que las primeras secuencias sean tan sentimentales, los primeros planos de él cuando su hija muere, su reacción, la mirada perdida, la sangre en el lavabo... dan justificación a todo lo que viene después, realmente no tiene nada que perder, y eso es muy peligroso para los malos.
Reconozco que me encanta Mel Gibson, y que eso podría hacerme perder objetividad, pero la película me ha sorprendido favorablemente, no tiene grandes pretensiones, pero te hace pasar un buen rato.
Puntuación de Kowalski:
Argumento: 8, para ser una peli de acción resulta original, el final sorprende y es muy entretenida.
Medios: 8, especialmente logrados los efectos de los disparos y el atropello.
Ejecución: 9, el director le da el pulso justo, y los actores están geniales, sobre todo Mel, por supuesto!!!!
Pingüinismo: 2, no hay pingüinos, pero nos encanta Mel Gibson!!!!!
En resumen: Estupenda para pasar una tarde muy entretenida.
Se ha embarcado en un proyecto a su medida, un personaje de su estilo que le permite lucirse y demostrar que aunque más mayor, sigue estando estupendo.
Martin Campbell dirige una historia que conoce muy bien, él mismo fue el director de la miniserie británica que ha dado origen a la cinta; y demuestra que se le dan muy bien las películas de acción. Tiene mucho ritmo, la violencia necesaria y un puntito tierno que le viene al pelo.
Mel Gibson encarna a un policia, algo chulo, duro y solitario que ve morir a su hija a la puerta de su casa. A partir de ahí empieza una venganza que va destapando un caso de corrupción politica y empresarial. Su personaje nos recuerda al de Rescate, o El patriota, por lo que Gibson está muy cómodo, y eso se nota. Van mezclando las escenas de investigación con la tristeza de un padre que recuerda los mejores momentos junto a su hija, lo que le da a la cinta un puntito sentimental que hace de contrapunto perfecto a la acción. Creo que es uno de los aciertos del director, dejar que las primeras secuencias sean tan sentimentales, los primeros planos de él cuando su hija muere, su reacción, la mirada perdida, la sangre en el lavabo... dan justificación a todo lo que viene después, realmente no tiene nada que perder, y eso es muy peligroso para los malos.
Reconozco que me encanta Mel Gibson, y que eso podría hacerme perder objetividad, pero la película me ha sorprendido favorablemente, no tiene grandes pretensiones, pero te hace pasar un buen rato.
Puntuación de Kowalski:
Argumento: 8, para ser una peli de acción resulta original, el final sorprende y es muy entretenida.
Medios: 8, especialmente logrados los efectos de los disparos y el atropello.
Ejecución: 9, el director le da el pulso justo, y los actores están geniales, sobre todo Mel, por supuesto!!!!
Pingüinismo: 2, no hay pingüinos, pero nos encanta Mel Gibson!!!!!
En resumen: Estupenda para pasar una tarde muy entretenida.
2 comentarios:
Mel está genial. Es grande en la actuación,: cuando llora por la muerte de su hija, cuando venga ante todo su muerte, cuando todavia se le ve una buena forma física pese a su edad, por el tiempo que hace que no actua y para nada se le nota. Es un actor genial. Y a mi, me encanta.
Ahora deseando ver la película que ha hecho con Jodie Foster como directora, The Beaver, en la que interpreta a un hombre deprimido que se desahoga con su títere, un castor.
Mel me dió mucha pena cuando se separó de su mujer despues de tantos años, pero es cierto que ahora se le ve más feliz y eso está bien, puesto que se estaba dejando mucho y se le veía muy entristecido, incluso ha dejado sus vicios del alcohol y el tabaco, así que...bravo Mel por tenerte de nuevo aquí.
Si, yo también tengo ganas de que estrenen The Beaver, tiene que ser curiosa!!!!!
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