Semana 32

Celia mide aproximadamente 40,5 centimetros, pesa alrededor de 1,9 kilos y ocupa buena parte del útero.
Su cuerpecito está engordando rápidamente y sus miembros ya se ven muy proporcionados respecto a la cabeza.
A través de la placenta recibe ingentes cantidades de calcio, absolutamente necesarias para el fortalecimiento de su esqueleto.
Los órganos principales ya están preparados para funcionar de forma autónoma fuera del seno materno y los pulmones están madurando muy deprisa.
Es muy probable que ya haya decidido su colocación definitiva para el parto y sus movimientos se limitarán a flexionar de vez en cuando brazos y piernas.
De todas formas, le queda ya muy poco sitio en el útero para moverse a su antojo y, como mucho, puede girar sobre si misma.
En los momentos de vigilia mantiene los ojos abiertos y su iris luce un color azul que no guarda relación con su pigmentación definitiva, que adquirirá varias semanas después de nacer.